Hoy hace 4 años, 4 años ya, que después de ir al cine y ver la película "FIRST MEN", esa madrugada María comenzase a romper aguas y saliésemos corriendo al hospital para que a las 13:45 (creo que fue a esa hora) naciera Itziar. Y hoy lo hemos celebrado en casa, el sábado lo hicimos en el parque de bolas con los amigos del colegio.
Cómo ha cambiado el mundo en estos 4 años, hoy se habla de muchas cosas horribles que pueden suceder en un futuro inmediato, y se utilizan palabras que dan miedo, entre ellas bomba nuclear.
La pandemia ha pasado, no en el 100% de los países, pero en España está resuelta, aun debemos ir a ciertos lugares con mascarilla (centros sanitarios, farmacia, dentista...), pero la mascarilla casi ha pasado a mejor vida.
Hoy de lo que se habla es de la guerra de Ucrania. Aun continúa la guerra, lo que iba a ser un paseo triunfal de los rusos en Ucrania se ha convertido en una guerra con muertos civiles, desplazados por Europa, y ha generado una nueva crisis, la crisis de la energía.
Europa en gran parte se nutre del gas ruso, pero Rusia ha cortado el suministro, Alemania se encuentra en una posición delicada, depende del gas ruso pero no puede apoyar al tirano Putin.
España en este caso se encuentra en una isla energética, no tenemos tanta dependencia de rusia, pero no tenemos centrales nucleares que nos abastezcan de energía, así que jugamos a varias bandas.
La energía hace ya bastantes meses que está en el candelero, el precio de la luz y la gasolina están desorbitados, y ahora que llega el invierno se va a notar las carencias, va a haber muchas familias que no vana poder permitirse el lujo de calentar la casa, eso es pobreza.
Nosotros aun nos bandeamos, pero esto no va de que yo puedo y el resto no me importa, esto va de que somos una sociedad donde mucha gente lo va a pasar mal.
Para colmo la guerra se está desmadrando y rusia ya habla de un ataque nuclear, y eso si que me da miedo. A veces oyendo las noticias, María y yo nos miramos y hablamos de esto como de una película, pero no es una película, está ahí lo queramos ver o no.
Y las que me dais miedo sois vosotras, Itzi y Oli, es vuestro futuro, no quiero que os enfrentéis a un mundo en guerra y devastado.
Es una época rara esta, una época en la que se hablan de coches eléctricos como una realidad cuando no tenemos la posibilidad de fabricar las baterías necesarias para la demanda, es un momento en el que estamos tocando el futuro con los dedos, con mejoras increíbles para el ser humano, pero a la vez tenemos presente unas posible hecatombe nuclear.
Al menos aun me queda miraros a los ojos, tocaros el pelo, agarraros la cara con las manos y daros un beso en esos cachetes gorditos. Aun me queda soñar en como vosotras dos podéis cambiar el mundo, como mis dos niñas van a ser mujeres valientes sin miedo a nadie.
Por si no os lo he dicho demasiado, para que no quede posible duda, por si mañana me quedo mudo, os quiero, os quiero de una manera que ni el tamaño del universo, ni 1/0.